domingo, 1 de junio de 2014

muchas personas se cuestionan constantemente esta pregunta, realmente vale la pena vivir y es precisamente las cosas de la vida cotidiana lo que nos puede hacer ser feliz, si mas personas entendieran ese hecho y vivieran el día a día sin pensar en el futuro, harían las cosas con mas entusiasmo, podrían dedicar mas tiempo lo que les gusta, serian mas felices. hay situaciones en la vida que son complicadas pero si desde pequeños nuestros padres nos enseñan afrontar las cosas de la mejor manera posible, y en todo encontrar la oportunidad de aprender y ver las cosa mas positivas, seriamos sin duda una mejor sociedad, con gente menos enferma y personas con una mejor actitud para convivir en sociedad y crear un mejor mundo. 
y nuestra tarea en contribuir en algo para lograr esto, no hay que hundirse en desesperación por algo que no se pueden controlar como es pensar en el futuro, mejor intenta día a día conocerte a ti mismo, encontrar tus fortalezas y debilidades,fijarse siempre en todos los detalles del día, que nunca un día pase como otro día mas, que mires que aprendes de las personas, que diferencies que cosa te generan malestar y lo mas importante pensar en que no te gustaría que te hicieran para que no se lo hagas a los demás, así se logra ser feliz y claro que vale la pena vivir. 

la ciencia avanza  


el campo de la psiquiatría a tenido en los últimos tiempos una increíble evolución, de donde se pasa de ser el medico que utilizaba unos métodos inhumanos, a mirar el paciente desde una forma integral, y ser el medico que escucha las dolencias del paciente y que entiende que la cura del cuerpo se encuentra en la sanación de la mente. se reconoció que estos métodos generaban mas daño y que muchas de las patologías mentales eran tratables con el simple hecho de escuchar el paciente, de dar un buen consejo, de detectar síntomas a tiempo, y no solo discriminando al paciente por estar "loko" y reconociendo que estos pacientes tiene los mismos derechos que una persona sin enfermedad mental.  
hoy en día muchas de estas técnicas se utilizan de una manera razonable y en otras áreas de la medicina, como la cirugía y evitando siempre que el paciente experimente algún tipo de dolor.



   La trepanación es una práctica médica que consiste en agujerear el cráneo. Antiguamente se realizaba con el objetivo de eliminar enfermedades consideradas de origen cerebral, mientras que en la actualidad se emplea como acceso quirúrgico en algunas operaciones de neurocirugía, como es el caso de tumores cerebrales o para tratar el hematoma subdural cuando cursan con hipertensión intracraneal.




hidroterapia: en la década de 1800 y en los inicios de 1900, los pacientes eran atados en interior de una bañera, o envueltos en paños, luego eran sometidos a chorros violentos de agua el paciente se estremecía cuando el chorro agua helada caía sobre su cabeza. La conmoción resultante tenía por objeto apartar las ideas fijas o ilusiones que pudieran albergar el enfermo, y la dureza del remedio debía compensarse con palabras amables y bromas. Pero éstas no se producían. también eran sometidos a baños sorpresas. Dos enfermeros sujetaban al paciente, lo desnudaban y le vendaban los ojos, y finalmente lo empujaban marcha atrás por un pasillo en dirección a un estanque donde lo sumergían en el agua fría durante varios minutos.

lobotomía: Durante más de dos décadas, en el siglo 20, los médicos creían que la eliminación física de las conexiones de la corteza prefrontal podría curar a los pacientes mentales. El procedimiento se realizaba regularmente insertando un objeto afilado (llamado Orbitoclast) a través de la nariz de un paciente, entonces se golpeaba con un mazo para alcanzar el objetivo previsto.


la terapia de shock de insulina: A principios de la década de 1920, el doctor Manfred Sakel fue pionero en la idea de la terapia a través del coma inducido. Enfermos mentales y esquizofrénicos fueron inyectados con altas dosis de insulina con el fin de ponerlos en estado de coma, Sakel creía que se curarían al salir del estado de coma.

son muchos los tratamientos utilizados anteriormente, que hoy en día no tienen muchos argumentación científica y otros que fueron mejorando con posteriores investigaciones, fue triste en muchos casos pero si no se hubiera iniciado no se sabrían muchas cosas hoy en día, lo mas importante es que la ciencia avanza y por eso siempre se deben replantear si las cosas se están haciendo bien por eso la historia siempre se debe conocer para no cometer los mismos errores que ya otras personas cometieron por nosotros.  

Delirium

Esta patología tiene un mayor prevalencia en el adulto mayor, aún más cuando se asocia a hospitalizaciones, procedimientos quirúrgicos y múltiples enfermedades. Podría ser evitable  en el contexto de una hospitalización? Cuando se ha observado que hasta el 10 a 30% de los adultos mayores que son hospitalizados terminan presentando esta condición y que el hecho de presentarla disminuye la tasa de sobrevida y la calidad de vida. Se podría hacer algo al respecto?
También hay que tener en cuenta otros factores de riesgo como lo es ser adulto mayor y estar en acilos, se ha reportado que hasta en un 40% estas personas tienen como manifestación clínica un estado delirante.

El delirium o síndrome confusional es un trastorno médico que implica la alteración global del estado mental que se caracteriza por la perturbación de la conciencia, de las funciones cognitivas (percepción, orientación, lenguaje y memoria) y de la conducta del individuo. En todos los casos, el delirium se produce secundariamente a una o varias agresiones que actúan directamente sobre el sistema nervioso central o bien de forma indirecta a partir de una afección sistémica. Se trata de una emergencia médica potencialmente reversible que afecta el pronóstico general del paciente
Criterios diagnósticos:
Características clínicas:


Etiología: En la siguiente tabla se puede observar los factores desencadenantes que pueden llevar a precipitar la aparición de un delirium, el conocimiento de este tipo de cosas es de suma importancia, porque no hay que tratar el síntoma, si no manejar la causa:
Conociendo la enfermedad, pensando en ella al identificar los signos y síntomas, identificando los factores de riesgo, y sensibilizándonos que hay más alternativas que  el uso de medicamentos,  se puede lograr un gran cambio y una menor incidencia en el servicio de hospitalización, como profesionales de la salud podríamos tener en cuenta los siguientes puntos:

  1. 1.       Identificar la enfermedad a tiempo y más cuando es un paciente de edad avanzada con múltiples cormovilidades o enfermedad mental de base
  2. 2.       Identificar factores de riesgo como lo son pacientes que toman anticolinérgicos, uso crónico de alcohol y la hipoglicemia. Ya que esto actúa disminuyendo la aceltilcolina que es uno de los principales neurotransmisores implicados en la patogenia del delirium
  3. 3.       Evitar la sobre formulación farmacológica, buscar otras alternativas como lo son dieta y ejercicio
  4. 4.       Dar psicoeducación a todos los pacientes y escuchar sus expectativas sobre la enfermedad
  5. 5.       Evitar procedimientos y hospitalizaciones innecesarios; ya que el estrés emocional como ya vimos que esto  genera puede precipitar a desencadenar más patologías. Y si es necesario, procurar que la instancia hospitalaria sea lo más corta posible.